No sé si tienen nombre, pero sí así fuera, no os lo diría. Es algo que no os incumbe. Sólo puedo deciros que son tipos de fiar. Aunque el primero por la izquierda tenga el rostro contraído y el primero por la derecha se oculte tras la publicidad de "dance studios" (quien pillara la información para asuntos profesionales...). Que no os despiste su quietud, son tipos muy intensos. Me consta que si te acercas a ellos, muy muy cerca... muy muy cerca... puedes escuchar como dicen:
" Hooolaaa... ninguno de nosotros es un parquímetro... "
Porque sí, amigos, hablan el idioma de aquel que acerque la oreja a sus camufladas bocas...
New York, New York, quién pudiera volver...
8 comentarios:
Deberías ver la pelicula Silent Running (Douglas Trumbull, 1972)y...eeh, escribir más seguido? :)
papel papera cartón kartoia papel papera cartón kartoia papel papera cartón kartoia papel papera cartón kartoia jajaja
We meet again, miss Peligro. And in Baltimore of all places.La profundidad de tu mantra, Gigi, escamotéa mi perspicacia. Acaso nuestra anfitriona se digne a iluminar mi insuficiente erudición en estas esotéricas y redundantes galimatías! Anybody home?
Qué elocuentes y encantadores, sin duda tienen ganas de hablar y quejarse... eso sí; cuidado con ellos que me consta que les divierte criticar al prójimo. Pero es que son tan encantadores!!
Hola! Te decía lo de Silent Running porque allí aparecen unos personajes que me recuerdan a los que inspiran lo que escribiste. Despues tenía curiosidad por lo de papel, cartón, blablabla.A lo mejor tu sabías (que en el fondo ni debería preguntar). Saludos!
Está bien que preguntes, Guely! Me temo que se trata de una anécdota universitaria que compartimos las tres mozas que aquí firmamos. Se trata de un contenedor de reciclaje que dejaba claro con un gigantesco rótulo que era expresamente para papel-cartón, en euskera paera-kartoia. Y si partimos de un momento de catársis personal para las tres, mirando por la ventana de un autobús que nunca llegaba a su destino, y eternizaba sus viajes con nosotras dentro, y a esto le sumamos tontería crónica y lectura sin piedad de todo cartel callejero, pues obtenemos el comentario de GIGI. Pero no te diré en qué endemoniadas e insolentes palabras derivaron el papel y el cartón mil veces repetidos...
Debo ver esa película, es una misión que tomo con gusto, gracias pòr la recomendación.
Y sí, debo escribir más. Me pongo a ello cuando termine de trabajar. Tengo algunas cosillas que compartir.
Bueno que me develas un misterio solo para concebirme otro! Pero no! Mis oidos de casto franciscano acaso no estén preparados contra vuestras arcanas injurias castizas. Que como diría el Marqués de Sade: tengo que proteger mi pureza! :)
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