miércoles, 30 de septiembre de 2009

TODAS AQUELLAS TONTAS COSAS QUE NUNCA HAGO

Estamos en otoño, aunque notemos temperaturas cálidas en nuestros cuerpecillos. Y es época de hacerse preguntas, o de volver al cole, o de empezar algo, o de terminar y empezar, o de lo que te suele inspirar el otoño cuando llega, a cada uno lo suyo. O de todas aquellas tontas cosas que nunca hago. En este otoño de mi vida, que casualmente coincide con la estación del año, voy a dedicarme a pequeños detalles (mientras dejo que terminen de caer las hojas que tengan que caer... es una visión tan melancólicamente bella...!). Pero no voy a hacer una lista oficial. Porque las listas oficiales o importantes parece que se intentan terminar antes de que una deje este mundo. Y todavía siento que es pronto para eso. Pero sí que quiero tener en la mente una mínima e inacabada (por si acaso) listucha de detalles a matizar. (¡TOMA YA!)

Me refiero a empezar a hacer todas aquellas tontas cosas que nunca hago. Hay quien nunca ha pedido un número de teléfono a un chico que acaba de conocer. O quien no ha dado el suyo en el mismo caso. Hay quien no se atreve a hablar en público, quien se compra un sombrero y no llega a estrenarlo, quien no quiere que le vean ni un centímetro del calcetín cuando cruza las piernas y el pantalón sube un poquito (moda pesquera, 2ª planta) porque recuerda que ha salido el sol por la mañana y el buen humor le ha hecho ponerse los de perritos... Una infinidad de cosas que todos hemos sentido ridículas o temibles en alguna ocasión. Al final son chorradas, lo prometo.

Pues quiero animarme y entrar en una tienda. Una tiendecita con bonitos vestidos que hay en mi pueblo y que lleva años llamándome y yo años deteniéndome en su escaparate. Pero por H o por B, nunca me decido. Y por J o por M, siempre pongo una excusa para no enfrentarme a su diminuto tamaño y la evidencia: van a preguntarme qué quiero en cuanto entre. Y eso por lo visto es algo SÚPERHORRIBLEQUÉMALQUEMEMUERO!!!! Espero que no llegue el próximo otoño sin que haya entrado.

Y quiero hacer esas cosas que podrían cambiar el día a día, los malditos detalles que marcan la diferencia. La mariposa que agita sus alas en un extremo del mundo y causa un terremoto en el opuesto. A eso me refiero. A dar pequeños y valientes pasos tontos que traigan grandes y acojonantes cambios buenos a mi vida. Quiero ser más veces la primera "voluntaria" cuando hay algo que sé que vamos a hacer todos tarde o temprano; aguantar la mirada a los chicos en el tren (ya lo estoy poniendo en práctica); comprar preservativos en una farmacia; reconocer que me pueden gustar los Creedence y Britney Spears por diferentes motivos en distintos momentos de mi vida y porque tengo un cortocircuito mental de estudio (y como esos dos ejemplos musicales muchos más); cantar en un karaoke; besar a un chico sin haberme asegurado de que le gusto y hacerlo sólo por intuición y porque me apetece; coger el coche y conducirlo sola de una vez; sonreír... en definitiva, todas aquellas tontas cosas que nunca hago, que van a cambiar mi vida. Y pronunciar el nombre de la pizza en el restaurante italiano cuando ya sé cómo se dice; y...

Y seguro que hay más, por eso los puntos suspensivos... Que no suspensos, cateados, sino en suspensión de pagos, ¡digo! con final abierto... que puede a su vez ser un principio... y es que los puntos supensivos al principio también dicen mucho, parece que han pasado cosas antes dignas de rodear de un halo de misterio... así, mira:

... y entonces será lo que haga, cuidar los detalles.

Si llego a escribir sólo esto pensaríais: ¿QUÉ PASÓ DONDE HAS PUESTO LOS PUNTOS? Y tendría que explicaros lo que he escrito desde la línea primera de este texto. Pero si empiezo otra vez a contar, esto se convertiría en un bucle eterno y la verdad no me parece que...

sábado, 5 de septiembre de 2009

HA SIDO ABANDONO VERANIEGO

Que he estado fuera un tiempo largo y corto. Largo desde la última vez. Corto porque vuelvo al trabajo el lunes. Prometo ponerme al día, lo prometo y lo voy a cumplir. Dadme tiempo para aclimatarme y en breve tendréis noticias frescas. Ahora, por el momento, saludicos.